16 noviembre, 2011

Treinta y cinco Nubes

Subir a una micro
sentarse
contemplar el taco en Av. España
escuchar la radio
los demás pasajeros
con sus teléfonos en mano
excusándose.
El chofer
la bocina
"las bocinas"
la guagua en el coche del frente
un accidente
las cámaras
los carros de emergencia
los infaltables "pacos"
la infinita soledad
como si ese asiento
fuese tu mundo o el mío.
La impaciencia
el reloj
que nos atrasamos
que las excusas que habrá que dar.
Todo eso se piensa
en esa infinita soledad
que es tu asiento
"tu" asiento
como si estuvieras destinado él.
Hay quienes eligen siempre el mismo
por seguridad
por el feng shui
que le gusta el paisaje
que nada le importa .
otros simplemente
se van parados
para que nadie les pida el asiento de al lado
o porque se bajan en el próximo paradero
o quizás es ese su espacio en el mundo
ese mismo espacio que recorremos
en las calles
las avenidas
los pasajes
la vida contemplada
desde las ventanas de una infinita soledad.


2 comentarios:

  1. -Hola, me puedo sentar al lado tuyo?

    ...entonces esa soledad, sera complice, calida, muy calida, dulce, y llegaremos a destino acompañandonos de mas soledad aun pero una nuestra.

    -Chao fue un placer viajar contigo!

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