30 diciembre, 2011

Cuarenta y cuatro Nubes

Cuando te consume la intriga
y se acuesta contigo la duda
en la mañana
el desayuno ingrato
de una llamada inconclusa
de una cita intervenida por el tiempo,
quebraja la serenidad del amanecer.
Rondan en mi cabeza tus ojos
y tus visitas se alargan
como visa de turista.
Me tiento a la ilusión
a embobarme
a acobardarme y no decir mis intenciones.
No caer en la desesperación
cuando el peso de ésta te aplaste.
Le gustare?
pensará en mí
o saldrá de su boca el tópico juvenil
"te quiero como a un amigo"
En estos días,
la aurora de pensamientos
azules y violetas
construyen más preguntas que alusiones
más ilusiones que realidad.
El soñador se quedará sólo otra vez
y el realista vivirá acompañado de mentiras.

28 diciembre, 2011

Cuarenta y tres Nubes

Su sonrisa
se extendió por el universo
entre las palabras,
el sonido de la guitarra,
una voz;
tuve su mano entrelazada.
El anima de la cotidianidad
se vertió en sus labios 
la luna
sonrió toda la noche
sonrió una eternidad.
me cegó 
me enterneció
me dejo palpitando
palpando las paredes para seguirla donde vaya
me enamoró tanto, 
que 
entre tanto,
no sé nada de mí.

10 diciembre, 2011

Cuarenta y dos Nubes

Porque vamos en sentido contrario
hallaremos la forma de juntar los caminos
porque nos carcome la risa
es que debemos sellarla en el papel
porque tenemos diferentes costumbres
es que compartiremos más que ayer.
Hoy el saludo fue más consciente
más fuerte, más honesto.
Hoy las miradas
son más amigas
más humanas,
Ellas
simplemente
son.

07 diciembre, 2011

Cuarenta y una Nubes

Iba detrás de ella
huyendo de mis temores
Acercando mis pasos
a los suyos
para mirarle de costado.

Su rostro escondido
tras desconocerme,
esa intimidad desatada
que me invitó a seguirla.

Así caminamos varias cuadras
al tono de nuestros zapatos,
cada tanto
una mirada cruzada de vergüenza
y una pizca de incertidumbre
se asomaba en ella.
Cada pequeña sonrisa entre sus mejillas
era una palabra que se esconde.

Súbitamente
cruzó frente a mi,
doblando en aquella esquina
dejándome aterido
perdiendo la vista en su andar,
- pensé -
¿se volverá a verme?
y como si me hubiese escuchado,
giro su rostro hacia mí
a lo lejos para buscarme
pero yo
ya me había retirado.

03 diciembre, 2011

Cuarenta Nubes

Busqué tras las cortinas de gentío
tras las miradas supervisoras
busqué ese verde oscuro
esa sonrisa
busqué un hola
un saludo
una palabra
una llamada por parlante
ir a responder
sólo por tenerte
unos segundos en mis ojos.

Sólo
las palabras mudas
hicieron incógnita
nuestra despedida.